Netflix tropieza con Asalto al Banco Central: la nueva miniserie de atracos que no logra cautivar a la audiencia

La ambiciosa miniserie de Netflix, destinada a conquistar audiencias, ha fracasado en atraer espectadores, acumulando solo 9,6 millones de horas vistas en su estreno.

Netflix enfrentó un revés significativo con el lanzamiento de su nueva miniserie Asalto al Banco Central, programada para ser la sucesora de la icónica serie española La casa de papel. Aunque la producción estaba diseñada para atraer a los fanáticos del género de atracos, se ha encontrado con una recepción negativa que ha sorprendido a muchos. La serie, que se estrenó el 8 de noviembre, no logró resonar en el público y sus cifras de audiencia han reflejado este descontento.

Expectativas no cumplidas

Desde los inicios de su promoción, Netflix había elevado las expectativas en torno a Asalto al Banco Central, esperando que esta serie de atracos se convirtiera en un nuevo fenómeno en el panorama audiovisual español. A pesar de que no contaba con el equipo creativo de La casa de papel, su narrativa se basaba en un caso real, intentando conectar emocionalmente con la audiencia de su predecesora. Sin embargo, el resultado ha sido desalentador.

En sus primeros días de emisión, Asalto al Banco Central acumuló aproximadamente 9,6 millones de horas vistas, lo que equivaldría a unas 2,7 millones de visualizaciones. Aunque esa cifra podría parecer razonable en un primer vistazo, es importante contextualizarla. Otras producciones exitosas de Netflix, como Berlín, un spinoff de La casa de papel, debutó con cifras abrumadoras, alcanzando 74,3 millones de horas vistas y alrededor de 11,3 millones de visualizaciones, marcando una diferencia abismal.

Comparaciones y un futuro incierto

La duración de Asalto al Banco Central podría explicar parcialmente estos resultados, ya que cuenta con solo 5 episodios y un total de 3 horas y 36 minutos de contenido, en comparación con las 6 horas y 34 minutos de Berlín. A pesar de estos factores, la estrategia de marketing de Netflix al asociar la serie con el legado de La casa de papel no logró atraer a la audiencia deseada. "Asalto al Banco Central ha sido un fracaso estrepitoso en audiencias y no ha logrado convencer a los espectadores", señala la crítica hacia la producción.

A medida que los días avanzan, existe cierta incertidumbre sobre si las cifras de visualización mejorarán. Hasta ahora, la serie ha llegado a ser la más vista en España desde su estreno, pero la realidad es que en mercados internacionales clave, como Estados Unidos, ni siquiera ha logrado ingresar al Top 10 de visualizaciones. Los desafíos parecen ser significativos para Asalto al Banco Central, y el futuro inmediato no ofrece muchas esperanzas para convertir la situación en un éxito rotundo.

En definitiva, este lanzamiento pone en evidencia la presión que enfrenta Netflix para mantener su estatus como líder en el ámbito del streaming. La falta de conexión con la audiencia y las desalentadoras cifras de visualización de Asalto al Banco Central hacen que la plataforma deba reevaluar su estrategia para atraer a los fans de este popular género.

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